DEVOCIONAL DIARIO- AVIVA EL FUEGO QUE HAY EN TI

 

Versículo clave:

“Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del don de Dios que está en ti por la imposición de mis manos.”

— 2 Timoteo 1:6 (RVR1960)

Reflexión

El apóstol Pablo exhorta a Timoteo a no dejar que el don de Dios se apague en su vida. El fuego simboliza la pasión, la fe, la dedicación y el llamado que el Señor nos ha confiado. Como todo fuego, necesita ser alimentado: si no se le da oxígeno y combustible, tarde o temprano se extingue.

En nuestra vida espiritual, el fuego puede apagarse cuando descuidamos la oración, la lectura de la Palabra o el servicio al Señor. Las pruebas, el cansancio o la rutina también pueden apagar nuestra pasión. Sin embargo, Dios nos recuerda que dentro de nosotros ya depositó ese fuego, y nos llama a avivarlo continuamente.

Avivar el fuego significa reavivar la fe, despertar la pasión, renovar la obediencia y servir con entrega. No se trata de depender de las emociones, sino de mantenernos firmes en el Señor, confiando en Su poder. Avivar el fuego es responsabilidad nuestra, pero el combustible viene de Dios: Su Espíritu Santo.

Hoy el Señor te invita a mirar dentro de ti y preguntarte: ¿Está tu fuego ardiendo intensamente o apenas quedan brasas? El Espíritu Santo sopla sobre ti para que ese fuego vuelva a brillar con fuerza.

Oración

Señor, gracias por el don y el llamado que has puesto en mi vida. Perdóname si he descuidado el fuego de tu Espíritu en mí. Hoy decido avivarlo con oración, adoración y obediencia. Sopla sobre mí con tu Espíritu Santo y renueva mi pasión por ti y por tu obra. Que mi vida arda con tu amor y sea luz para los que me rodean. Amén.

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